¿Cómo llegué al mundo de la neurodiversidad?

Publicado el agosto 1, 2022Categoría: Artículos, BlogEtiquetas: , 2,7 minutos de lectura

Hay un momento en la vida de ser mamá cuando te preguntas si hay algo que estás haciendo mal… porque las cosas no están funcionando como quisieras. Ves a las otras familias y sientes que te cuesta mucho más trabajo el sobrevivir el día sin colapsar. Hay días en los que simplemente sientes que te das por vencida porque las reacciones de tu hijo son tan impredecibles que no sabes si lo que viene es un grito o un abrazo.

Hace años leí un libro que se llama “Criando a tu hijo enérgico” (Raising your spirited child) de Mary Sheedy Kurcinka. Creo que me llamó la atención la portada que decía: una guía para padres cuyo hijo es más intenso, sensible, perceptivo, persistente y tenaz. Nunca me han gustado usar adjetivos negativos para hablar de los niños, así que intenté ver los aspectos positivos, pero seguía sintiendo en mi cuerpo que también me inclinaba en ver esos otros aspectos como persistente y tenaz.

Estaba rodeada de varias amigas maravillosas y sabias con las que compartíamos nuestros aprendizajes sobre educación y crianza, y me daba un poco de inseguridad al oír que “cuando hay un niño complejo y tenaz seguramente está relacionado a cómo es la mamá”. ¿Será que soy tenaz y persistente? ¿Será que soy muy intensa y sensible? Me reí cuando realmente me dije, creo que sí soy un poco intensa y tengo una fuerte personalidad, pero la experiencia había sido diferente con mi hijo mayor.

Adoro a mis dos hijos, tienen 10 años de diferencia, pero ¿por qué no sentí esa intensidad con mi primer hijo? Estas preguntas me llevaron a seguir buscando respuestas y así llegué a interesarme en libros como el que les conté al inicio.

Validar sentimientos, no usar premios y castigos, exposición a la naturaleza, juego no estructurado… lo estaba intentando todo como decían los libros, como lo había hecho con mi hijo mayor, como lo hacían mis amigas a quienes admiraba, pero seguían existiendo esos momentos de intensidad que llegaban de la nada.

Me certifiqué en Disciplina Positiva, que es basada en Psicología Adleriana y a pesar de que los principios funcionaban la mayoría de veces, las herramientas en sí, la mayoría de veces, no parecían ayudar. Mientras tanto muchas mamás me escribían agradeciéndome que lo que había compartido les ayudaba tanto.

Fue así como llegué al mundo de la neurodiversidad, y sí que es un mundo increíblemente interesante, complejo, hermoso, difícil, confuso y transformador en todo sentido. “Neurodiversidad” es un término que se utiliza para describir las diferencias en el funcionamiento del cerebro de las personas. La idea es que no hay una manera “correcta” de funcionar del cerebro. Las personas neurodiversas pueden mostrar comportamientos diferentes al de las personas neurotípicas, debido a que funcionan de una manera diferente.

Esta es solo una introducción al mundo de la neurodiversidad. Si te identificas con lo que acabo de contar, escríbeme porque quisiera explorar más este mundo conociendo a más personas, y poder contarles todo lo que estoy descubriendo…